por No hace mucho tiempo tuve una conversación con uno de mis amigos porque estaba muy preocupado porque creía que tenía un tumor ano, pero lo único que se me ocurrió decirle fue que no se angustiase antes de que tuviese la opinión de un médico y no por una mera suposición. Cuando al final consiguió que le viese el especialista consiguió relajarse porque el especialista le dijo que solamente tenía una almorrana y no era un tumor como él había pensado. Al final no tenía nada, solamente se estaba preocupando por nada. En los tiempos que corremos estamos demasiado influenciados por toda la información que tenemos. Personalmente creo que éramos mucho más felices cuando no disponíamos de tanta información. Hoy en día a la mínima duda todo el mundo va corriendo a consultarle al señor google, me dan un poco de pena. Personalmente soy de la opinión de que primero hay que pensar las cosas y si después de un buen rato no consigo sacarlo pues ya lo busco, pero no busco nada sin antes pensarlo un buen rato. Creo que tanta información no es buena para nadie, aunque la sociedad piense al contrario de mi. Porque mucha de la información a la que tenemos acceso en estos días son mentiras. Y esa clase de mentiras están perfectamente camufladas con la información verdadera por eso es tan complicado saber lo que es cierto y lo que no lo es.
Estoy bastante orgulloso de no ser como el resto de la gente en ese aspecto, porque creo que eso de buscar tanto en google no es nada bueno para nuestra inteligencia, es más, creo que hace que nuestra inteligencia disminuya a pasos agigantados aunque la gente no lo quiera ver de igual manera. Esto más que una evolución me parece una involución. Los que manejan la información de esta manera controlan a todos aquellos que vayan a provenirse de esa información. Y todo eso viene desde que disponemos de internet en nuestros teléfonos móviles. Cuando no teníamos teléfonos móviles pienso que todo era mucho mejor y todos éramos mucho más felices.