por Está más que claro que las patatas son el acompañamiento clásico para casi todos los mejores platos de la gastronomía española, pero las patatas se pueden preparar de muchas formas pero para mi la mejor de todas esas formas es el puré de patatas. Porque las patatas fritas y las patatas cocidas están muy buenas pero no pueden competir contra el puré de patatas.
Además, haciendo el puré de patatas tengo la ocasión de tomar algo de leche, ya que no tomo demasiada, y además al comprar la leche central lechera puedo acceder a los puntos del club central lechera.
No entiendo a la gente que me dice que no le gusta el puré de patatas, entendería que me dijesen que no les gusta el puré de verduras o algo así pero no puedo pasar por alto que menosprecien al puré de patatas. Uno de los hijos de un primo mío tuvo la osadía de decirme en una comida de navidad que no le gustaba el puré de patatas y eso que se lo había mojado un poco con la salsa de la carne asada, lo cual mejora mucho al puré de patatas. No podía creer lo que estaba escuchando, por lo que decidí rendirme con este niño y dedicar mi atención en otra cosa.
Recuerdo cuando era un niño que en la televisión ponían un anuncio en el cual animaban a la gente a comer patatas de cualquier forma posible y tenía una canción muy pegadiza, creo que todos los niños de esa época queríamos comer patatas gracias a ese anuncio, aunque tampoco entiendo mucho el porqué de esa campaña publicitaria, ¿no se comían patatas antes? Hoy en día esta clase de campañas ya no tendría sentido porque las patatas están muy extendidas dentro de nuestra gastronomía y todos las echaríamos de menos si las patatas desapareciesen de nuestros platos. Mi plato favorito de siempre, sin tener en cuenta el pulpo, son las patatas rellenas de carne de restos del cocido no hay un manjar mayor y es una comida de aprovechamiento para aprovechar lo que sobra de una comida tan rica como el cocido.