Aunque parezca mentira, me he vuelto a cambiar de habitación por segunda vez este año, pero esto fue porque se arreglaron las habitaciones que estaban en malas condiciones debido a las obras del edificio de al lado del mío. La habitación a la que me he mudado, tiene la ventaja de que es mucho más grande que la habitación en la que estaba y me permite tener sitio para poner la bicicleta estática si me apetece o para hacer ejercicios de suelo como abdominales o flexiones de brazos. Esta vez la mudanza la dirigí yo e hice la distribución a mi gusto que fue lo que no me dejaron hacer en la mudanza anterior. Solamente me falta conseguir una cortinas verticales, porque no me podía llevar las cortinas de la otra habitación. Pero lo que sí que me he podido llevar de la habitación es la lámpara, que es una lámpara antigua de cuando mis hermanos y yo éramos unos niños y es una lámpara que la puedes colocar a la altura que mejor te convenga aunque a mi madre no le guste demasiado la idea de que me quede con la lámpara vieja.
Aunque parezca raro esta habitación que es bastante más grande que la anterior habitación en la que estaba, es más caliente. Es algo que no puedo comprender muy bien.
Os puedo asegurar de que no me voy a volver a mudar de habitación en mucho tiempo, porque volver a trasladar todas mis cosas fue un trabajo bastante duro y con todo el sitio del que dispongo ahora me parece que en esta habitación ya me quedo. Casualmente esta habitación a la que me he mudado ahora es la habitación que tenía cuando era un niño y me trae muy buenos recuerdos, fue como volver a casa.
Pero esta habitación también tiene desventajas respecto a mi habitación anterior, y la principal desventaja es que estoy mucho más lejos de la cocina y del baño, antes los tenía justo al lado y ahora tengo que recorrerme el pasillo entero para poder ir al baño o a la cocina.